La calidad de los suelos agrícolas está definida por los parámetros físicos, químicos, biológicos y sus interacciones, los cuales determinan el nivel de productividad de los cultivos.
Sólo el 0.007% del agua en la Tierra es potable, esta cantidad disminuye año tras año debido a la contaminación que continúa creciendo a nivel mundial.
El desarrollo de las enfermedades en los cultivos agrícolas y en general de cualquier otro sistema biológico, depende de la compleja interrelación entre el huésped, el patógeno y las condiciones ambientes. Por lo que, en el caso de los patógenos del suelo, abre la oportunidad para las interacciones con otros microorganismos, que ocupan el mismo nicho ecológico.
El crecimiento en la industria del metanol obliga a la búsqueda de continua de nuevas tecnologías que a su vez sean económicas y amigables con el medio ambiente.
Los productos derivados del petróleo son los químicos más utilizados en la actualidad. Con el requerimiento masivo de energía para la industria del transporte y el crecimiento exponencial del uso de agroquímicos en la agricultura, los accidentes durante su extracción, producción y transporte han ido en aumento y con esto, el numero de lugares contaminados alrededor del mundo, causando daños severos a seres humanos, plantas y animales.
La definición oficial para los probióticos difiere entre diferentes autores e instituciones 1-4, pero siempre está relacionada con: microorganismos vivos que, en las circunstancias adecuadas, pueden mejorar la salud de las plantas, animales o humanos..